Cómo hornear el antiguo pastel ruso de pescado «nakriopok»

Durante muchos siglos, los pasteles han sido en la cocina rusa un símbolo de hospitalidad, calor de hogar y celebración. No es de extrañar que la palabra “pastel” en ruso sea “pirog”, que a su vez procede de la palabra rusa para “fiesta” (pir). 

El nakriopok es un pastel increíblemente jugoso, cuya receta fue creada hace mucho tiempo por las mujeres que vivían en las regiones de Pskov y Tver. El más codiciado se horneaba con arroz, porque antiguamente era caro. Sólo las familias ricas podían permitirse un pastel así.

Por regla general, se horneaba sobre todo en los días festivos. En general, el pastel era símbolo de felicidad y prosperidad, y su forma redonda simbolizaba el sol. Algunas mujeres se dedicaban a adivinar el futuro en función del resultado de la tarta. Por ejemplo, si la corteza y la forma de la tarta salían bien, se esperaba que el año estuviera lleno de prosperidad y éxito.

La palabra que da nombre a este pastel, nakriopok, procede del verbo ruso krepit ("sujetar"), asociado al método de preparación. Cuenta con un relleno de gachas de arroz, o también se puede utilizar trigo sarraceno o avena. Luego hay una capa de huevos duros con cebolla. Encima del relleno hay una capa densa de lonchas de salmón ligeramente salado, que sirve para "mantener unido" el pastel. Todo ello se sella con masa de levadura. A veces, la parte superior de la tarta se decora con pequeños peces de masa.

Según otra versión, el pastel se llama nakriopok por sus ingredientes saciantes y nutritivos. En efecto, la tarta es sustanciosa, lo que en ruso antiguo se traduce por la palabra nakrepisti. Así que ten en cuenta que el nakriopok probablemente no sea un plato para cuando esté a dieta, pero sin duda constituye una comida deliciosa y saciante.

Ingredientes para una tarta (26 cm de diámetro):

• 400 g de harina 
• 200 g de cerveza ligera o kéfir
• 50-60 de mantequilla
• 4 cucharadas de nata agria 20-30%
• 12 g de levadura
• 1 cucharada de azúcar
• Media cucharadita de sal
• 200 g de salmón ligeramente salado
• 3 huevos
• 100 g de arroz
• 1 cebolla
• Verduras al gusto
• 100 ml de leche para remojar el pescado

Preparación:

El primer paso es remojar el pescado en leche. Si se escoge un pescado entero, es mejor cortarlo en rodajas suficientemente gruesas. Llena el plato de pescado con leche y déjalo en remojo durante al menos 12 horas. Si el pescado es muy salado, entonces durante un día. El remojo en leche dará ternura y jugosidad al futuro relleno.

Ahora, vamos a hacer la masa. En un bol aparte, mezcla el kéfir (o la cerveza), la levadura, el azúcar y la sal. A continuación, colócalo en un lugar cálido durante 20 minutos.

En un bol grande, tamizar la harina, añadir la masa madre preparada anteriormente. Amasar bien. Al final, poner mantequilla blanda y crema agria; mezclar de nuevo.

Dejar reposar la masa durante una hora en un lugar cálido. Luego mezclar un poco con la mano y dejar de nuevo durante una hora.

Mientras tanto, vamos a hacer el relleno. Cocer el arroz y los huevos hasta que estén tiernos. Pelar los huevos de la cáscara, cortar en círculos.

Picar finamente la cebolla, así como las verduras.

Dividir la masa en dos partes. Extiende la mayor parte sobre una bandeja de horno formando una capa. Ahora, extiende el arroz sobre ella, y presiónalo un poco en la masa.

A continuación, espolvorea con hierbas. Utilizo un poco de eneldo.

Coloca la capa de huevos picados.

Luego la capa de cebollas.

Me aseguro de extender el pescado para que no queden espacios entre las rodajas de pescado mientras se hornea.

Sujeta la tarta con la masa restante. Puedes engrasar la parte superior del pastel con un huevo batido y una cucharada de crema agria.

Ahora, mete la tarta en el horno precalentado a 180℃ durante unos 50 minutos. ¡Que aproveche!

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