Ciudades que se hicieron pasar por occidentales en películas soviéticas (Vídeo)
A los cineastas soviéticos no les resultaba fácil obtener permiso para viajar al extranjero, por lo que había que construir pabellones con localizaciones adecuadas o buscarlas dentro de la URSS. Estas ciudades se convirtieron en las principales subalternas de las extranjeras.
Santa Carolina, EE UU - Koktebel y alrededores
La remota ciudad del Salvaje Oeste de Santa Carolina “se erigió” en Crimea, durante el rodaje de El hombre del bulevar de los capuchinos, de 1987. No se podía hacer un viaje de negocios a EE UU y se buscaba un lugar adecuado dentro de las fronteras soviéticas. Crimea era el lugar ideal: la naturaleza local recordaba mucho a las praderas del Salvaje Oeste, y la variedad de paisajes permitía rodar el material como si hubiera sido rodado en diferentes lugares.
El lugar clave era la zona de Bélaya skala y la orilla de Tíjaia bujta, cerca de Koktebel. Aquí se filmó la persecución de indios, el ataque de la banda a la diligencia del maestro Festa y los paseos de los protagonistas.
Los esfuerzos del grupo fueron apreciados: en el festival de cine Golden Duke-87, la película ganó el Premio Especial del Jurado "Por la auténtica representación del Salvaje Oeste en las salvajes condiciones del cine soviético".
Suburbios de Devon, Inglaterra - Cabo Etodor y sus alrededores
En la búsqueda de un castillo adecuado para la adaptación de la novela de Agatha Christie Diez negritos (1987), el grupo cinematográfico tuvo que recorrer toda la costa oeste de la URSS, pero no se pudo encontrar nada. Encontraron lo que necesitaban en Crimea, en un promontorio salvaje cerca del famoso "Nido de Golondrina".
El castillo del sr. Owen, donde se desarrollan los acontecimientos de la pelóculo se hizo con ayuda de montañeros. Se encontraba en una roca desolada que se adentraba en el mar.
Otras escenas se rodaron en el propio Nido de Golondrina, un castillo pseudogótico de principios del siglo XX. Pero como el espectador soviético lo sabe bien, fue cuidadosamente camuflado y no filmado en primer plano.
Londres, Inglaterra - Tallin, República de Estonia
Para adaptar otro misterio de Agatha Christie, El secreto de los mirlos (1983), fue necesario recurrir a subterfugios. Porque sólo se permitió entrar en Londres a tres miembros del equipo: un cámara, un director y un asistente. Se filmaron los planos generales de la ciudad que marcaban el lugar de la acción, y los actores estuvieron cerca de Tallin, en Estonia.
La Mansión Vasalemma era un lugar adecuado. Fue construido a principios del siglo XVIII, con reminiscencias de un castillo de caballero inglés, por lo que encajaba perfectamente en la obra de Christie.
Costa Sur de Inglaterra - Kaunas, República de Lituania
Otro sustituto de Inglaterra fue Lituania. La ciudad balnearia de St. Loup, al sur del país, donde se desarrollaron los acontecimientos con el famoso detective Hércules Poirot en la novela de Christie El misterio de Endhouse, se filmó en Kaunas, la segunda ciudad lituana más grande. El lugar de las escenas en la costa de Cornualles fue el embalse de Kaunas.
El público alabó la estilización del director Vadim Derbeniov; algunos de los detalles de los interiores y del vestuario fueron, en efecto, recreados con gran sensibilidad.
Estambul, Turquía - Bakú, República de Azerbaiyán
En la película soviética El brazo de diamantes (1969), Bakú hizo de Estambul; al equipo de rodaje no se le permitió entrar en Turquía. El lugar principal en la República de Azerbaiyán era el casco antiguo de Icheri Sheher y sus atracciones: el Palacio de los Shirvanshahs, la Mezquita Dzhuma y la Torre de la Doncella. Se colgaron carteles en varios idiomas, incluido el farsi, que no tiene nada que ver con Estambul, para decorar. Sin embargo, dio la impresión de que la película se desarrolla realmente en el extranjero.
Berlín, - Riga, República de Letonia
El drama de espionaje Diecisiete momentos de primavera (1971-1973) sobre un espía soviético infiltrado en las más altas esferas del poder en la Alemania nazi se rodó en parte en la RDA. Pero el papel de Berlín fue interpretado por Riga, un favorito de los cineastas soviéticos. Concretamente la calle Jauniela, que según el guión era la Blumenstrasse.
Por cierto, esta calle también interpretó la calle Baker de Londres en la película soviética de Sherlock Holmes.
De Londres, a Leningrado
San Petersburgo ha sido calificada como la ciudad más europea de Rusia por su aspecto arquitectónico. En la Unión Soviética la ciudad se llamaba Leningrado y los cineastas la usaron para que pareciera Londres, donde vivía Sherlock Holmes.
Por ejemplo, el club de cartas Bagatelle, donde Watson fue testigo de la pelea entre Sir Ronald Adair y el Coronel Moran, se filmó en la mansión de Matilda Kschessinskaia, primera bailarina del Teatro Mariinski y amante secreta del zar Nicolás II.
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