Las primeras mujeres heroínas de la Unión Soviética (FOTOS)

Reproducción de TASS
Reproducción de TASS
En otoño de 1938, la noticia se difundió por todo el país: por primera vez, una tripulación exclusivamente femenina a bordo del avión ANT-37 completó un vuelo sin escalas desde Moscú hasta el Lejano Oriente, estableciendo un nuevo récord mundial de distancia. Por su hazaña, estas valientes pilotos se convirtieron también en las primeras mujeres en recibir el máximo galardón del país: el título de Héroe de la Unión Soviética.

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La piloto Valentina Grizodúbova, que ya ostentaba cinco récords mundiales en avionetas, fue quien propuso realizar un vuelo sin escalas con una tripulación exclusivamente femenina. Propuso superar la marca de los pilotos franceses (4.000 km) utilizando un bombardero, ya que un avión civil no habría podido cubrir semejante distancia. El plan tuvo éxito, especialmente porque unos meses antes, una tripulación exclusivamente masculina ya había establecido su propio récord, recorriendo 7.850 km entre Moscú y Spassk-Dalni, en el krai de Primorie, en 24 horas y 36 minutos.

El avión ANT-37 Ródina despegó de Moscú el 24 de septiembre de 1938. Al día siguiente, el periódico Pravda informó sobre el vuelo, pero nadie sabía qué había ocurrido con la tripulación. Más allá de los Urales, se perdió el contacto con el avión, dejando a las pilotos solas frente a las inclemencias del tiempo: densas nubes, ráfagas de viento y, trágicamente, la pérdida de sus mapas, que fueron succionados por la escotilla astronáutica abierta. Volaron prácticamente a ciegas. Pronto también comenzaron a quedarse sin combustible: Ráskova saltó en paracaídas (permanecer en el cono de la nariz era mortalmente peligroso), mientras que Grizodúbova y Osipenko lograron aterrizar con éxito el avión en la taiga.

Alexéi Mezhúiev, Borís Fishman / TASS
Alexéi Mezhúiev, Borís Fishman / TASS

Se desplegaron cincuenta aviones y más de cien destacamentos de infantería para buscarlas, rastreando la taiga. Finalmente, el 3 de octubre el ANT-37 fue avistado desde el aire. La tripulación fue trasladada a Komsomolsk del Amur y luego a Jabárovsk. Contra todo pronóstico, establecieron un nuevo récord: llegaron al Lejano Oriente en 26 horas y 29 minutos, recorriendo 6.450 km (5.910 km en línea recta). Un mes después, el 2 de noviembre, recibieron el título de Héroe de la Unión Soviética.