9 símbolos sexuales del deporte soviético (Fotos)
Conquistaron no sólo cimas deportivas y récords mundiales, sino también los corazones de aficionados de todo el mundo. Las deportistas soviéticas más encantadoras están en nuestra selección.
Anna Dmítrieva
18 veces campeona de tenis de la Unión Soviética en individuales, dobles femeninos y dobles mixtos. En 1958, fue la primera deportista soviética en participar en el Wimbledon Junior y llegó a ser finalista. Al término de su carrera, Dmítrieva se convirtió en comentarista deportiva.
Larisa Petrik
En el palmarés de esta gimnasta figuran numerosas victorias en campeonatos de toda la Unión. Entre ellas, el oro en el Campeonato de la URSS en viga de equilibrio, la plata en “all-around”, salto y ejercicio de suelo. Petrik es campeona absoluta de la Unión Soviética y campeona del mundo en competición por equipos. En los Juegos Olímpicos de México 1968 ganó el oro en competición por equipos y ejercicio de suelo, y el bronce en barra de equilibrios.
Valentina Sténina
En los Campeonatos del Mundo de Esterund de 1960, la patinadora se proclamó Campeona del Mundo en la prueba clásica “all-around” y ese mismo año ganó la plata en los 3.000 metros de los Juegos Olímpicos de Squaw Valley. Repitió su éxito un año después en los Campeonatos del Mundo de Tensberg (Noruega) y en 1964 en los Juegos Olímpicos de Innsbruck.
Emma Gapchenko
14 veces plusmarquista de la URSS en tiro con arco, diez veces campeona de Moscú. Gapchenko estableció dos récords mundiales: en ejercicios M-1 (tiro consecutivo a diferentes distancias) obtuvo 1235 puntos y a 50 metros 311 puntos. En 1971, Emma Gapchenko se convirtió en campeona del mundo absoluta, y un año después, en Múnich, fue la primera arquera soviética en ganar el bronce olímpico.
Larisa Latínina
Una de las atletas más condecoradas de la historia: Latínina tiene en su haber 18 medallas olímpicas, nueve de oro, cinco de plata y cuatro de bronce. En los Campeonatos Europeos de Bucarest de 1957, Larisa Latínina ganó todas las medallas de oro. Un año después triunfó en el Campeonato del Mundo de Moscú, donde ganó cinco medallas de oro y una de plata.
Natalia Kuchínskaya
La llamaban la gimnasta más bella de la Unión Soviética. Debutó en el Campeonato de la URSS en 1964. Dos años después brilló en los Campeonatos del Mundo de Dortmund, donde ganó tres medallas de oro. En 1968, Kuchínskaya participó en los Juegos Olímpicos de Ciudad de México: no sólo ganó los ejercicios de barra de equilibrios y la competición por equipos, sino que también se ganó el corazón de los aficionados. La llamaron la Novia de México, y el hijo del presidente del país llegó a pedirle matrimonio.
Ekaterina Gordéieva
La espectacular pareja formada por Ekaterina Gordéieva y Serguéi Grinkov encandiló a los aficionados de todo el mundo. Juntos han brillado en los mayores campeonatos de patinaje artístico: han ganado el Europeo y el Mundial. Su programa de patinaje libre con música de Mendelssohn, Mozart y Chopin sigue siendo una de las actuaciones más impresionantes de la historia del patinaje artístico.
Yolanda Chen
Chen dio sus primeros pasos en este deporte en el patinaje artístico, pasó al pentatlón y luego se decantó por el salto de longitud y el triple salto. En 1988, saltó 7,16 metros. Y en la era postsoviética, en 1995, batió el récord mundial de triple salto en pista cubierta: 15,03 metros. Tras finalizar su carrera deportiva, Chen se convirtió en comentarista deportiva.
Natalia Annenko
Esta rubia brillante se hizo un nombre a principios de la década de 1980, convirtiéndose en campeona mundial júnior. Junto con su compañero Henry Srétenski, compitió en los Campeonatos de Europa: ganaron una medalla de plata y tres de bronce.
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