Cómo los rusos descubrieron Alaska
“Vimos que no era una isla, sino una gran tierra, una costa de arena amarilla, viviendas como las yurtas a lo largo de la costa y mucha gente caminando por esa tierra...”, recordaría Iliá Skurijin, miembro de la expedición.
El barco Arcángel Gabriel se acercó a la península en la zona del futuro cabo Príncipe de Gales, pero su tripulación no pudo desembarcar debido al mal tiempo.
Más tarde, el barco dobló el cabo y fue visitado por habitantes de la zona que se acercaron a él en pequeñas embarcaciones. A través de un intérprete, los nativos contaron a los rusos las riquezas de su tierra: “Hay un bosque, también hay ríos.... Hay ciervos salvajes, martas y zorros, y castores”.
Sin embargo, los viajeros no pudieron explorar a fondo la “gran tierra”. Debido al mal estado del barco se vieron obligados a regresar a Kamchatka a toda prisa.
La expedición del Arcángel Gabriel en 1732 se convirtió en un hito importante en el proceso de colonización rusa de Alaska y las islas Aleutianas y en la creación de la llamada América rusa.
Síguenos en nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes