
Estos son algunos barcos de la mítica flotilla del Dniéper que puedes visitar en la actualidad

Además de Telegram, Puerta a Rusia difunde contenidos en su página de VKontakte. ¡Únete a nosotros!
Operando en los ríos del este de Europa (desde el Dniéper y el Prípiat hasta el Óder y el Spree en pleno Berlín), esta fuerza fluvial jugó un papel crucial en apoyo a las tropas del Ejército Rojo: escoltó convoyes, participó en desembarcos anfibios y contribuyó directamente a la toma de Berlín.

Algunos de sus barcos han sobrevivido como monumentos que rinden homenaje a aquella historia.
Uno de los más emblemáticos es el monitor fluvial clase Zhelézniakov, el único de su tipo que se conserva. Construido en Kiev en los años 30, era un gigante para su tiempo: 48 metros de eslora, 7,6 de manga y casi 240 toneladas. Armado con cañones de 100 mm y una tripulación de 70 marineros, era lento pero formidable.

También se conservan algunos de los famosos BK (barcos cañoneros blindados), verdaderos tanques flotantes. Estos barcos pequeños pero veloces iban armados con torretas de tanques T-28, T-35 o T-34 y fueron el caballo de batalla de la flotilla. Uno de ellos, el BK instalado en Mariúpol.

Otros se encuentran en Blagovéshchensk.

También puedes encontrar estos barcos en, Jabarovsk y Pinsk, ciudad donde se libró un importante desembarco y que hoy cuenta con su propia calle dedicada a la Flotilla del Dniéper.
Aunque la Flotilla del Dniéper fue disuelta tras la guerra, su legado permanece vivo en estos barcos-memoriales, testigos de una guerra fluvial pocas veces recordada, pero decisiva en la victoria sobre el nazismo. Visitar uno de ellos es asomarse a un capítulo heroico y fluvial de la historia soviética.