El tanque KV-1. ¿Por qué sorprendió a los enemigos de la URSS?
El tanque KV se convirtió en el principal tanque pesado soviético al inicio de la Gran Guerra Patria. Su grueso blindaje lo hacía prácticamente impenetrable a las armas antitanque y cañones del ejército alemán a larga distancia. Aunque diseñado como un tanque de ruptura, se usó principalmente en batallas defensivas. Con la aparición de los ‘Tiger’ y ‘Pantera’ alemanes, quedó obsoleto y fue reemplazado por los tanques IS.
Historia y características técnicas
Antes de la Segunda Guerra Mundial, el Ejército Rojo buscaba tanques modernos para superar las limitaciones del T-35, un diseño de cinco torretas que resultaba lento y difícil de manejar. En 1939, en la planta de Kírov, se desarrollaron tres prototipos: el T-100, el SMK y el U-0, siendo este último adoptado como KV (Kliment Voroshílov). Su blindaje frontal era de 75 mm y alcanzaba una velocidad máxima de 34 km/h.
Producción y combate
Fabricado desde 1940, el KV se destacó al inicio de la guerra. Su blindaje resistía el fuego enemigo, requiriendo artillería pesada para ser destruido. En junio de 1941, un solo KV-1 detuvo durante casi un día a una división alemana en Lituania, retrasando su avance estratégico.
Aunque poderoso, su diseño tenía limitaciones como baja velocidad y problemas mecánicos. A pesar de ello, el KV dejó una huella importante en los combates de la Segunda Guerra Mundial.