El culto a la personalidad o cómo Stalin 'entró' en todos los hogares (Fotos)
“Como la palabra comunismo
el sonido de tu nombre se ha convertido en familiar”
Estos versos los escribieron poetas georgianos en honor de Stalin. Se encuentran entre los numerosos autores de “Staliniana”, un conjunto de obras de propaganda que elogiaban al líder soviético. En honor del mandatario se levantaron monumentos, se bautizaron ciudades, fábricas y calles, se rodaron películas, se escribieron novelas y poemas, cuadros. Además de todo esto, Stalin se convirtió en el principal protagonista de carteles, sellos de correos, calendarios, además de aparecer en manteles y encajes. En muchos pisos, escuelas y otras instituciones había un busto suyo.
El culto a la personalidad que se inició en 1929 con una celebración masiva del 50º cumpleaños de Stalin y no fue desacreditado hasta 1956 en el 20º Congreso del PCUS. Más tarde, unos veinte años después, que se retiraron de la circulación los productos estalinistas. Así es como se veían las cosas que se podían encontrar en casi todas las casas soviéticas.