Libia

A juzgar por las declaraciones públicas que se han oído a lo largo de todo el conflicto entre el ejército y los "insurrectos" en Libia, uno podría llegar a la conclusión de que ahora Occidente, con la participación de algunos países orientales, da comienzo a una operación militar sólo para guardar las apariencias. Los líderes políticos y los ministerios de Asuntos Exteriores ya se han apresurado varias veces a enterrar a Gaddafi esperando evidentemente que la oposición libia triunfe con la misma rapidez con que ocurrió en Túnez o Egipto. Pero cuando se supo que la oposición estaba perdiendo terreno, el mundo occidental se consideró obligado a ayudarle, a su pesar. La iniciativa partió de los gobiernos europeos que en diferentes medidas tratan de fortalecer su papel en el mundo, regular los flujos migratorios desde Oriente Próximo y resolver sus problemas internos. Estados Unidos se vio más bien forzado a entrar en este conflicto.

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